domingo, 30 de octubre de 2011

Últimos días para colaborar en Manifiesto Azul 11

Como os anunciamos hace unas semanas, Colectivo Iletrados está preparando el nuevo número de nuestro fanzine: Manifiesto Azul. El plazo para participar con una colaboración se cierra este Martes 1 de Noviembre. Podéis enviar vuestro poema, microrrelato, reseña, ilustración o traducción a colectivoiletrados@hotmail.com . No lo dudes y participa en esta nueva edición de nuestro fanzine de literatura e inquietudes varias.

jueves, 27 de octubre de 2011

David Roas gana el Premio Setenil


Hoy se ha dado a conocer el fallo del premio Setenil 2011, organizado por el Ayuntamiento de Molina de Segura y dotado de 12.000 euros, que ha recaído en el escritor y profesor barcelonés David Roas. El galardón premia su libro Distorsiones (Páginas de Espuma, 2010), el mejor, según el jurado, de los 64 libros de relatos que se han presentado.

Desde Colectivo Iletrados queremos darle a David Roas la enhorabuena por esta gran noticia. Para los que no conozcáis la obra de Roas, os dejamos uno de los textos de Distorsiones, "Das Kapital", que adelantó en Manifiesto Azul 5.

Das Kapital.

Overbooking. Los labios de la señorita que me atiende tras el mostrador de Swiss Air acaban de pronunciar la temida palabra. Para una vez que llego al aeropuerto con bastante antelación, resulta que el avión ya está lleno. La empleada, muy amable, se disculpa (Désolée, monsieur), me entrega una tarjeta de embarque sin asiento asignado y me pide que me dirija a la puerta A-8, donde sus compañeros tratarán de arreglar el problema. Sé que debo confiar en la eficacia helvética, pero, dado mi natural pesimismo, algo en mi interior me advierte de que el día ya no puede depararme nada bueno.
Aparto de mi mente tales pensamientos y me dirijo, siguiendo las instrucciones de la amable empleada, a la puerta A-8. Paso sin dificultades los diversos controles, me acerco al mostrador de la compañía, y tras explicar mi problema a las dos personas que me atienden, éstas me piden que me siente y espere. Al parecer, no soy el único con dicho problema. Una pareja me observa y sonríe como diciéndome Sí, a nosotros nos ha pasado lo mismo. Abro el macuto, saco un libro y me sumerjo en su lectura para entretener la espera.
Al cabo de un rato que se me hace eterno, uno de los empleados de Swiss Air que antes me han atendido se me acerca y me entrega una tarjeta de embarque. Pero al revisar el billete, recibo la segunda sorpresa del día, pues me han asignado un asiento de primera clase. Como tiene que tratarse sin duda de un error, voy raudo a comunicárselo a los empleados de Swiss Air, quienes, sin abandonar su amabilidad, aunque con cierto retintín de condescendencia, me dicen que no me preocupe, que no es ninguna confusión, sino que es algo usual recolocar a un pasajero de segunda clase (dicho así suena fatal) en primera.
Al entrar en el avión no puedo reprimir un escalofrío. Un mundo nuevo (sí, lo confieso, es mi primera vez) se abre ante mí. Nervioso como un niño en la noche de reyes, me dirijo a la plaza que me han asignado: allí me espera un enorme asiento de cuero gris donde me arrellano con un leve gruñido de placer. Compruebo, casi con lágrimas en los ojos, que puedo estirar las piernas con toda comodidad.
Antes del despegue, una azafata reparte con una amplia sonrisa periódicos, chocolatinas y agua (su acostumbrado uniforme azul me parece más sobrio y elegante que nunca). Entonces, un decepcionante pensamiento aflora enseguida en mi mente: ahora seguro que me dice que a mí no me dan nada de eso porque no he pagado el billete correspondiente. Me equivoco (otra vez), y recibo, agradecido, los mismos presentes que el resto de mis compañeros. Tras comerme la chocolatina, abro el recipiente del agua. Resulta deliciosa. Agua de primera, me digo, haciendo un chiste fácil.
El avión despega cómoda, limpiamente. En pocos minutos, se estabiliza y la amable azafata de antes empieza a servir la cena. Más sorpresas: la trucha está exquisita, el vino es un Mosela estupendo (250 cc.), el postre de chocolate es sublime (la azafata, al verme disfrutar, me trae otro plato, guiñándome un ojo), incluso el café resulta excelente... Y todo acompañado con inesperados cubiertos de metal (busco, disimuladamente, caras semíticas a mi alrededor, pues les están entregando el avión en bandeja; pero mis miedos son infundados).
Me levanto y voy al baño. Antes de regresar a mi plaza, siento la irreprimible tentación de mirar al otro lado de la cortina que la azafata, como es habitual, ha corrido tras el despegue para aislar la zona de primera clase (un acto que en mis anteriores vuelos siempre he sentido, desde mi asiento de segunda, como un insulto). Pero mi curiosidad no está motivada porque ahora me considere –circunstancialmente- superior a los viajeros de esa parte del avión, sino por una cuestión de perspectiva. En otras palabras, para experimentar qué se ve desde el otro lado de esa frontera de tela, ligera pero infranqueable.
Aparto un poco la cortina y me asomo. El panorama que aparece ante mis ojos es sobrecogedor: los viajeros se agitan salvajemente agarrados a los apoyabrazos de los asientos, algunos rezan, otros gritan, los miembros de la tripulación, sentados al final del avión, no pueden reprimir su pánico... Las fuertes sacudidas abren algunos de los compartimientos y caen maletas, objetos, prendas de ropa, sobre los aterrorizados viajeros.
Entonces me doy cuenta de que yo no noto nada. Miro detrás de mí y compruebo que en la zona de primera clase todo está tan tranquilo como al principio: mis compañeros han acabado de cenar y unos se han puesto a leer, otros charlan pausadamente, algunos incluso dormitan, mientras la azafata sirve café acompañada de su plácida sonrisa.
Vuelvo a asomarme al otro lado de la cortina y contemplo la misma escena espeluznante. Los viajeros siguen gritando, muchos lloran histéricos, una mujer abraza desesperadamente a su bebé. Las turbulencias son tan violentas que temo que el avión no pueda superarlas.
Asustado, estoy a punto de decirle algo al tipo que tengo sentado más cerca cuando noto una leve presión en el brazo izquierdo. Es nuestra azafata. Como si yo fuera un niño pequeño que ha hecho una travesura, me hace un simpático mohín de reproche, coge mi mano y, tras cerrar delicadamente la cortina, me acompaña hasta mi asiento.
Antes de sentarme le pregunto si puede traerme un whisky. Sin decir una palabra, toma una botella del carrito metálico, sirve una generosa cantidad de escocés y me entrega el vaso con una enorme, deliciosa y sedante sonrisa.
Arrellanado en mi asiento de suave cuero gris, me dejo embriagar por el sabor de la malta y finjo que pienso en la revolución.

David Roas.

domingo, 23 de octubre de 2011

Suicidios pusilánimes

Suicidios pusilánimes

Arrojarse al vacío desde un sótano.

Beber lejía de marca blanca.

Dispararse con una escopeta de feria.

Sentarse en las vías de un tren de juguete.

Intentar ahogarse en el Mar Muerto.

Ahorcarse con la corbata.

Comenzar a fumar un cigarrillo al día.

Esperar, mirando el cielo azul, un rayo.

Ser atropellado por un coche aparcado.

Mendigar para pagarse el cianuro.


Basilio Pujante Cascales

martes, 18 de octubre de 2011

Gran éxito del primer Lunes Literario


Anoche asistimos a la primera sesión de los Lunes Literarios de Zalacaín. El recital de Vicente Cervera se cerró con un gran éxito debido a la gran cantidad de público que se congregó y a la calidad de los poemas del poeta y profesor. En este enlace tenéis más información sobre el evento.

Los miembros de Colectivo Iletrados queremos darle la enhorabuena a nuestro compañero Alberto, por el buen pie con el que ha comenzado esta andadura. Os recordamos que los Lunes Literarios continúan en Zalacaín y que el día 24 será el turno de José Daniel Espejo y el 31 de José Óscar López.



domingo, 16 de octubre de 2011

Mañana comienzan los Lunes Literarios en Zalacaín

Hoy os traemos una gran noticia para la cultura en Murcia: la cafetería Zalacaín (Calle Enrique Villar, 13) ha creado el ciclo semanal "Lunes Literarios", que se quiere convertir en un encuentro periódico con las letras. Al frente de esta iniciativa está nuestro compañero de Colectivo Iletrados Alberto Caride, por lo que nuestra asociación estará muy liagada a este ciclo.

Los Lunes Literarios comienzan mañana con el recital que realizará Vicente Cervera a partir de las 21:30 en Zalacaín. Tenéis más información de esta lectura y del ciclo en el blog.

jueves, 13 de octubre de 2011

Nueva edición del CLI: Jorge Luis Borges, "Poesía".


Tras una temporada de descanso, vuelve el Club de Lectura Iletrado. Para la inauguración de este curso, hemos elegido a uno de los grandes: Jorge Luis Borges y su poesía, quizá menos celebrada que sus narraciones pero, no por ello, menos interesante.
Os invitamos a comentar la obra poética de este autor el próximo día 27 de octubre (jueves) a las 20.00 horas en la cafetería Ítaca de Murcia.

sábado, 8 de octubre de 2011

Fotos de la Inauguración de Mursiya Ilustrada

Ayer disfrutamos de una gran noche de poesía y arte en La Azotea. Colectivo Iletrados organizó un recital para inaugurar la exposición "Mursiya Ilustrada" de Cristina Franco Roda. El origen de esta exposición está en las plaquettes que Cristina ilustró para el ciclo Mursiya Poética. Os dejamos con algunas imágenes de la noche y en los próximos días tendréis un vídeo de lo sucedido ayer.


Los Iletrados con Cristina Franco.

El público en La Azotea.

Alberto Caride.

Joaquín Piqueras.

José Daniel Espejo.

domingo, 2 de octubre de 2011

Este Viernes: Inauguración de Mursiya Ilustrada

En el pasado Invierno, Colectivo Iletrados organizó la primera edición de Mursiya Poética. Durante un mes, cinco poetas murcianos se sucedieron en recitales individuales en los que leyeron una selección de sus poemas.

Para cada uno de estos encuentros, Colectivo Iletrados editó una plaquette con los textos del autor y con una ilustración original de la artista plástica Cristina Franco. Para que todos podáis disfrutar de estas y otras obras de Cristina, la Asociación La Azotea organiza una exposición (Mursiya Ilustrada) que inauguraremos este próximo Viernes 7 de Octubre con un recital. Será a partir de las 21h y en él participarán tres de los autores del ciclo Mursiya Poética: José Daniel Espejo, Joaquín Piqueras y Alberto Caride.

Cristina Franco, la Asociación La Azotea y Colectivo Iletrados os invitamos a esta inauguración que tendrá lugar en el local de La Azotea (Calle Estrella 2, Murcia).