"Elvis está vivo" - Andrés Calamaro
martes, 31 de marzo de 2009
miércoles, 25 de marzo de 2009
Revista miNatura
Desde el blog de Colectivo Iletrados queremos presentaros la revista digital miNatura. Esta publicación, que nació en Cuba y que actualmente se distribuye a través de Internet desde Castellón, está dedicada a la minificción de carácter fantástico. Ricardo y Carmen, los editores de la revista, llevan ya publicados casi un centenar de números con esta doble premisa de brevedad y de temática inquietante.
Recientemente ha aparecido el número 93, monográfico dedicado a los fantasmas y los lugares encantandos. En sus 54 páginas se mezclan autores clásicos como Shakespeare, Plinio o Luciano de Samóstata, con escritores contemporáneos de varios países. Al final de este número, que podéis descargaros en este enlace, se incluye un interesante "Glosario del Buen Cazafantasmas". En esta otra web podéis acceder a los números atrasados de miNatura.
Recientemente ha aparecido el número 93, monográfico dedicado a los fantasmas y los lugares encantandos. En sus 54 páginas se mezclan autores clásicos como Shakespeare, Plinio o Luciano de Samóstata, con escritores contemporáneos de varios países. Al final de este número, que podéis descargaros en este enlace, se incluye un interesante "Glosario del Buen Cazafantasmas". En esta otra web podéis acceder a los números atrasados de miNatura.
lunes, 23 de marzo de 2009
"UNA BRIGADA DE MADRES TERESA"
Había leído y oído algo de lo que se cuenta sobre los “horrorosos” servicios de Urgencia de los hospitales.
Súbitamente, el día 18 de marzo de 2009, a medianoche, en mi casa parisiense, creo topar con la Muerte. Caigo al suelo, dislocado.
No puedo levantarme. Indefenso, me siento incapaz de moverme.
Pido socorro. Nadie me oye.
Tengo la impresión de estar emponzoñado. Por un veneno que me revuelve mis adentros.
Me arrastro hacía el teléfono. Que nunca llegaré a alcanzar. A la velocidad de cinco metros por hora. Mi cabeza no responde. He perdido el equilibrio. Y mi cerebro se bambolea. Pero mi cara permanece aplastada en el suelo. Mis ojos no se dejan dominar. Se descentran, mareados. Voy a desaparecer definitivamente. Voy a ocultarme para siempre, pero rodeado por un océano de inmundicia vomitada.
Y de pronto, cuando había perdido toda esperanza, aparecen dos enfermeros del SAMU. Dos “madres-Teresa”.
No quiero que me vean en el estado en que estoy. No quiero que se aproximen. Que les apeste mi miseria.
Mis ojos son incapaces de fijarlos. Me los tapo con la mano.
Me piden que me incorpore. No puedo. Y si hubiera podido no lo hubiera querido. Prefiero permanecer acurrucado. Y dejar que llegue el final. Será menos doloroso Y sobre todo menos pestilente y vergonzoso.
Y, sin embargo, los dos enfermeros no paran de decirme gentilezas. Para ellos soy un anónimo. Me parece que tienen un bonito acento. ¿franco-marroquí? ¿portugués? ¿arrabalero? ¿bretón? Me tratan de
- “Monsieur” .
Con infinito respeto.
A mí que me siento menos que un trapo sucio.
Uno de los enfermeros, abrazándome, me incorpora. Me limpia. Ayudado por su colega. Mientras me mantiene en sus brazos el segundo me abrocha los pantalones. Y me consuela al mismo tiempo.
-“Adelante, Monsieur….”
Sienten que temo descoyuntarme al menor esfuerzo. Me miman. Por fin en andas y volandas me llevan a una ambulancia.
Acierto a decir por vez primera, ¡tan tarde !
-«Merci beaucoup…».
Y por primera vez voy a recibir la respuesta que oiré de todos los miembros del servicio de Urgencias del Hospital Cochin de París:
-“No nos lo agradezca; estamos aquí para ayudarle”.
Y los dos samaritanos desaparecen.
Para dar paso a varias enfermeras que me desnudan. Me arreglan. Me cuidan. Me visten de azul. Luego de amarillo. Me preguntan a menudo
-“¿Quiere algo? ¿Se siente mejor?”
Llegan cuidadores, médicos, internos. Para ellos también soy un anónimo. Todos con la misma preocupación por mi estado. Con el mismo deseo de auxiliarme.
-“¿Quiere utilizar mi móvil particular?”
Y yo repito que estoy envenenado. Que algo he tomado...
Pero ellos no dejan de hacerme radiografías y escaners y análisis.
Descubren que el mal lo causa el laberinto de mi oído interno. Que hace meses mi cabeza topó contra una barra de acero. Y que ahora surgen las consecuencias.
Buscan lo mejor para curarme. Piensan inmediatamente en el mejor especialista.
-“Sabe usted, es el más competente. Pero está ocupadísimo”.
Consiguen que el Profesor Pascal Corlieu venga a verme a Urgencias. Con sus aparatos de cosmonauta y su saber legendario.
…
Estoy a salvo, re-equilibrado y en casa.
[Toda mi vida… me ha frustrado no llegar a ser el santo pagano de mis aspiraciones. Con lo fácil que les resulta alcanzar la santidad civil a esta brigada de la Fraternidad y de la Urgencia.]
Mil gracias a todos, desde el camillero hasta el catedrático. De todo corazón
Pero sé que todos y cada uno va a repetirme una vez más:
-“No nos lo agradezca; estamos aquí para ayudarle”.
Fernando Arrabal
Reproduzco este pequeño relato, cedido gentilmente por el catedrático de Literatura Hispanoamericana de la Universidad de Murcia, Victorino Polo, en el que el dramaturgo Fernando Arrabal explica por qué no va a poder asistir al ciclo de conferencias 'Encuentros de Primavera', que se viene realizando en la citada universidad.
De este modo, Arrabal debería ofrecer mañana, a las 17.00 horas, una rueda de prensa en el Hotel Arco de San Juan, pero por motivos de salud (que el mismo autor explica a modo de relato), los médicos han desaconsejado que vuele desde París a Murcia.
miércoles, 18 de marzo de 2009
Era pacífico y peligroso
No pretendo compartir mi dolor, ni nada de eso. Le habría parecido un ejercicio cursi. Una mariconada. Sólo aprovecho esta página para dedicarle el homenaje que merecía. Que le habría gustado tener cuando palmara. Murió hace unos días, a los cincuenta y nueve tacos, tras un derrame cerebral que lo tuvo un mes con el pie en el estribo. Pepe Perona, maestro de Gramática. No firmaba de otro modo. También era catedrático de Gramática Histórica de la Universidad de Murcia, pero eso le importaba menos. Era un maldito esnob. A algunos de ustedes les suena, supongo, porque durante quince años asomó en estos artículos, de vez en cuando, en su calidad de miembro de la selecta hermandad de arponeros de Nantucket, entre humo de tabaco y ginebra azul. También fue personaje de una novela mía: Néstor Perona, maestro cartógrafo. Hasta en el cine salió un pavo haciendo de él. Bastante bien, por cierto. Ahora se ha muerto, el muy cabrón, dejándome aullando como un lobo triste. Buscando alguien en quien vengarlo, y vengarme. Café, tabaco y silencio, hoy prohibidos, decía. Y libros. Miles de ellos. Sabía griego, latín. Su tesis doctoral se tituló Influencia de Nietszche y Schopenhauer en la generación del 98. Lo sabía todo sobre Nebrija, sobre quien publicó una importante edición crítica. También tuvo la sangre fría de sacar In silentium, libro con todas las hojas en blanco. Lo tengo en mi biblioteca. «No leáis, que no merece la pena –decía–. Así, al menos, habrá menos chicles pegados en el suelo de los museos y las bibliotecas.» Le encantaba dar por saco a tontos, mediocres y canallas con ese desprecio refinado e inteligente, desprovisto de piedad, que era su marca del Zorro. «El peor cáncer de este tiempo es que las masas hayan aprendido a leer», escribía. «Así, la inteligencia se ha puesto a su servicio y se ha degradado.» Poseía una perspicacia apocalíptica y una cultura extraordinaria, que ponía a disposición de sus amigos como quien pone sobre la mesa un paquete de cigarrillos, un buen vino y unos cuantos vasos. Misántropo, malhumorado, gruñón, nunca tuvo el menor respeto por el género humano. Sólo por su familia y sus pocos amigos, a los que escogía deliberadamente. E infeliz quien no pasara el examen. A veces, en alguna cena, yo tenía que saltar casi por encima de la mesa para trincarlo por el cuello cuando le daba por escupir dialécticamente a alguien. Despreciando era letal. Implacable. La mejor definición que conozco es del periodista Antonio Arco, que lo conocía bien: «Era pacífico y peligroso». Me hizo feliz a menudo, acompañándome en momentos importantes de mi vida como escritor. Venía con el resto de la peña y se sumaba a comidas, a cenas, a copas hasta las tantas. Leal como un arponero intrépido. Yo lo admiraba, como todos, sin condiciones ni límites. Pertenecía a una casta superior. El día que consiguió su cátedra, el profesor Belmonte y yo cerramos una discoteca y le organizamos una fiesta invitando a todos los jóvenes de su facultad. Y quemamos Murcia. Entre mis mejores recuerdos se cuenta una noche en la que él y Alberto Montaner –otro monstruo extraordinario–, catedrático de la Universidad de Zaragoza, discutieron en el café Gijón de Madrid, adoptando uno el punto de vista dominico y otro el jesuita –podían haber intercambiado papeles sin despeinarse–, en un duelo irónico, brillantísimo, que nos tuvo a los amigos fascinados durante horas. Y es legendaria la anécdota de cuando una alumna fue a pedirle a Pepe Perona que dirigiera su tesis de licenciatura, y él dijo: «De acuerdo. Empezará usted yendo a la biblioteca del Vaticano, a Florencia y a Bolonia para prepararse. Le procuraré el modo de hacerlo». Ella respondió: «No creo que mi novio me deje». Y entonces el maestro de Gramática, indicándole la puerta, zanjó: «Pues que le dirija la tesis su novio, señorita». La ausencia de su sonrisa divertida y fatigada, sin esperanza, deja en mi vida un agujero del tamaño de un disparo de postas. Nunca olvidaré su mueca escéptica de sabio educado en la altivez del suicidio, que sabe cómo y dónde termina todo. «La cultura se ha ido a la mierda –solía decir–. Occidente ha desaparecido.» Adivinaba la venganza cíclica de la Historia en este cochambroso mundo viejo, impotente, ya sólo capaz de parodiarse a sí mismo, estrangulado por políticos iletrados y masas de turismo analfabeto. «Es un error promover la lectura del Quijote en las escuelas –escribió una vez–. ¿Quién librará a los alumnos de las depresiones promovidas por la lectura y su meditación?» Lo peor de todo es que, muriéndose a destiempo, el maestro de Gramática revienta nuestro plan de asistir juntos a las últimas horas de esta caduca y moribunda Europa: acodados en la ventana de una biblioteca, copa de vino y cigarrillo a mano, viendo a la gente correr aterrada por las calles mientras los bárbaros violan a respetables matronas, saquean la ciudad y arde Roma. XLSemanal, 22 de marzo de 2009 .
Desde Colectivo Iletrados hemos querido reproducir este artículo escrito por Arturo Pérez Reverte en memoria del profesor de la Universidad de Murcia, José Perona, de quien era gran amigo. El artículo ha sido tomado del blog http://lasirenitasurfea-sirenita.blogspot.com/, a modo de pequeño homenaje también nuestro. ya que varios iletrados, entre ellos yo, recibimos las lecciones magistrales del profesor de Gramática, que así era como le gustaba que le llamaran...
martes, 17 de marzo de 2009
Nuestro vocal A, Alberto Caride, primer premio de Poesía en el 'Certamen Buho Creativo 2009'
El pasado viernes se fallaron los premios de la octava edición 'Búho Creativo' de Las Torres de Cotillas, un certamen artístico organizado por la Concejalía de Juventud del citado municipio y el Instituto de la Juventud de la Región de Murcia.
El certamen está dirigido a los jóvenes nacidos o residentes en nuestra Región, según las edades establecidas para cada modalidad (y que abarcan de los 13 a los 45 años), y en él resultó premiado nuestro vocal A, también llamado Alberto Caride o 'Vulture'.
Los jóvenes participantes se repartieron un total de 3.100 euros (200 de ellos para el bolsillo castigado de nuestro vocal) divididos en las modalidades de pintura, fotografía, cuento, poesía, manualidades/cerámica y cartel de Carnaval 2010.
lunes, 16 de marzo de 2009
Convocatoria de colaboraciones para el MA 7
Tras una reunión el pasado sábado en la que se constató la llegada del buen tiempo, el Colectivo Iletrados anuncia a todo el Ciberespacio que ya estamos preparando MANIFIESTO AZUL 7. Este número será editado por nuestro vocal e Juanma, y queremos que sea un paso adelante en el número de páginas y de ejemplares.
Os invitamos a todos vosotros a participar en este séptimo número de nuestro fanzine. Para ello sólo tenéis que enviar vuestro poema, microrrelato, ilustración, reseña de libro, etc. a nuestro e-mail: colectivoiletrados@hotmail.com
El plazo de aceptación de colaboraciones se cierra el 15 de Abril, por lo que tenéis un mes para participar en el MA 7. Si todo va bien, para Mayo estará en la calle y colgado como siempre en este blog, la nueva edición de nuestra publicación. A finales de ese mes esperamos también hacer la presentación del fanzine.
Gracias a todos; esperamos que os animéis a participar en Manifiesto Azul 7.
Os invitamos a todos vosotros a participar en este séptimo número de nuestro fanzine. Para ello sólo tenéis que enviar vuestro poema, microrrelato, ilustración, reseña de libro, etc. a nuestro e-mail: colectivoiletrados@hotmail.com
El plazo de aceptación de colaboraciones se cierra el 15 de Abril, por lo que tenéis un mes para participar en el MA 7. Si todo va bien, para Mayo estará en la calle y colgado como siempre en este blog, la nueva edición de nuestra publicación. A finales de ese mes esperamos también hacer la presentación del fanzine.
Gracias a todos; esperamos que os animéis a participar en Manifiesto Azul 7.
jueves, 12 de marzo de 2009
GRIS SUCIO
El mar a media noche en una ciudad sin mar,
el miedo, capaz de recitar en una parada
de autobús unos versos de Federico,
el amor oscuro del soneto al dilatarse tus pupilas,
¿por la oscuridad de la noche o la claridad del deseo?
Tus ojos, que comenzaron la noche
examinando mis zapatos, acabaron por situarse
a 1,75 centímetros del suelo, justo a la altura
donde te esperaban los míos.
Y cuando la noche huyó a refugiarse en la mirada
de algún borracho rezagado,
manoseamos las palabras en busca de su letra pequeña,
de una intención a la que aferrarse
para que la sugestión surtiera efecto.
Con los primeros rayos comenzaron a deterretírseme
las excusas que algún día me sirvieron para decir no,
acariciándome las derrotas como a un perro tiritante de frío...
¡Qué difícil manejar los adverbios cuando algo tiene sentido!
Y qué fácil añadir a las palabras
adjetivos manidos como estrellas fugaces.
el miedo, capaz de recitar en una parada
de autobús unos versos de Federico,
el amor oscuro del soneto al dilatarse tus pupilas,
¿por la oscuridad de la noche o la claridad del deseo?
Tus ojos, que comenzaron la noche
examinando mis zapatos, acabaron por situarse
a 1,75 centímetros del suelo, justo a la altura
donde te esperaban los míos.
Y cuando la noche huyó a refugiarse en la mirada
de algún borracho rezagado,
manoseamos las palabras en busca de su letra pequeña,
de una intención a la que aferrarse
para que la sugestión surtiera efecto.
Con los primeros rayos comenzaron a deterretírseme
las excusas que algún día me sirvieron para decir no,
acariciándome las derrotas como a un perro tiritante de frío...
¡Qué difícil manejar los adverbios cuando algo tiene sentido!
Y qué fácil añadir a las palabras
adjetivos manidos como estrellas fugaces.
lunes, 9 de marzo de 2009
Vídeos del recital de la 2ª Fiesta Iletrada (y 2)
Álvaro y Basilio presentan la 2ª Fiesta Iletrada, mientras Laura lo interpreta para sordos.
Ahora son Fuensanta y Lucía las que interpretan en lengua de signos los dos poemas recitados por Raquel.
Terminamos este repaso al recital con la poesía de Antonio, interpretada también por Vero.
sábado, 7 de marzo de 2009
Vídeos del recital de la 2ª Fiesta Iletrada (1)
Alberto recitando y Rocío interpretando para sordos el poema.
Óscar recita dos poemas y Maria José y Noelia los interpretan en lengua de signos.
En este vídeo son María la que interpreta el poema de Marta
Terminamos la primera parte del repaso al recital con Juanma recitando sus poemas y María José y Noelia interpretándolos en lengua de signos.
En este vídeo son María la que interpreta el poema de Marta
Terminamos la primera parte del repaso al recital con Juanma recitando sus poemas y María José y Noelia interpretándolos en lengua de signos.
martes, 3 de marzo de 2009
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