2009 agoniza en su lecho de muerte mientras el Colectivo está más vivo que nunca. Lo advertimos hace unos meses: éste 2009 era un año especial para nuestra Asociación; incluso los hubo que definieron este año como el del amor, y en cierta medida acertaron de lleno. Aunque, claro, el amor a veces tiene unas cosas...
La primera década del siglo XXI está a punto de echar la persiana y es hora de hacer un breve balance. Pero ¿por dónde empezar?. Creíamos que nunca íbamos a tener que hacernos esta pregunta y, sin embargo, la duda nos asalta porque son muchos los proyectos en los que andamos metidos.
2009 ha sido el año en que ha nacido el Club de Lectura Iletrado (CLI), el año en que nos dejaron colarnos en la Frecuencia Modulada -¡gracias Juanfra Mirete!- y ver nacer La Hora Iletrada (LHI), el año en que participamos en nuestra primera Feria de Asociaciones y en el que recibimos nuestra primera subvención, el año en que armados con boli BIC en mano y cargados de fotocopias vencimos a la burocracia y conseguimos el CIF, el año también en que pudimos disfrutar de otro azulado Manifiesto Azul (MA), el año en que hemos podido colaborar en la organización de un concurso de microrrelatos -!gracias Shanti Vasundhara!-, el año en el que los poemas sonaron a poemas y las letras de nuestros cantantes favoritos sonaron a poesía, y también el año en el que uno de nuestros miembros ha sacado su primer libro -¡enhorabuena Alberto!-.
Por todo esto Colectivo Iletrados despide la década con un sabor muy dulce y con mucha ilusión. Sí, ilusionados porque seguimos creyendo que nuestra dedicación merece la pena, que aún hay infinitas letras que juntar, que la poesía puede -y debe- llegar a la calle y encontrarse de bruces con el que ni siquiera la piensa, que podemos abrir aún más nuestros oídos y nuestros ojos para empaparnos del mundo, que podemos, en fin, hablar de literatura sin que eso suene a rancio o aburrido y, más bien al contrario, suscite un gran interés.
También por eso tenemos que dar las gracias: a TI, que nos lees, que nos ves, que nos saludas en los recitales, que nos escribes al correo, que participas en los clubs de lectura, que te animas a escribir y participar en nuestro fanzine. Gracias, de verdad, porque sin vuestra colaboración también nosotros -como este 2009- estaríamos a punto de morir.
Despedimos la década convencidos de que lo que nos espera en este 2010 es infinitamente mejor, ¿te apetece verlo?.
La primera década del siglo XXI está a punto de echar la persiana y es hora de hacer un breve balance. Pero ¿por dónde empezar?. Creíamos que nunca íbamos a tener que hacernos esta pregunta y, sin embargo, la duda nos asalta porque son muchos los proyectos en los que andamos metidos.
2009 ha sido el año en que ha nacido el Club de Lectura Iletrado (CLI), el año en que nos dejaron colarnos en la Frecuencia Modulada -¡gracias Juanfra Mirete!- y ver nacer La Hora Iletrada (LHI), el año en que participamos en nuestra primera Feria de Asociaciones y en el que recibimos nuestra primera subvención, el año en que armados con boli BIC en mano y cargados de fotocopias vencimos a la burocracia y conseguimos el CIF, el año también en que pudimos disfrutar de otro azulado Manifiesto Azul (MA), el año en que hemos podido colaborar en la organización de un concurso de microrrelatos -!gracias Shanti Vasundhara!-, el año en el que los poemas sonaron a poemas y las letras de nuestros cantantes favoritos sonaron a poesía, y también el año en el que uno de nuestros miembros ha sacado su primer libro -¡enhorabuena Alberto!-.
Por todo esto Colectivo Iletrados despide la década con un sabor muy dulce y con mucha ilusión. Sí, ilusionados porque seguimos creyendo que nuestra dedicación merece la pena, que aún hay infinitas letras que juntar, que la poesía puede -y debe- llegar a la calle y encontrarse de bruces con el que ni siquiera la piensa, que podemos abrir aún más nuestros oídos y nuestros ojos para empaparnos del mundo, que podemos, en fin, hablar de literatura sin que eso suene a rancio o aburrido y, más bien al contrario, suscite un gran interés.
También por eso tenemos que dar las gracias: a TI, que nos lees, que nos ves, que nos saludas en los recitales, que nos escribes al correo, que participas en los clubs de lectura, que te animas a escribir y participar en nuestro fanzine. Gracias, de verdad, porque sin vuestra colaboración también nosotros -como este 2009- estaríamos a punto de morir.
Despedimos la década convencidos de que lo que nos espera en este 2010 es infinitamente mejor, ¿te apetece verlo?.